El 10 de diciembre de 1948 se firmó la Declaración Universal de los Derechos Humanos, donde se ponía especial énfasis en que todos los seres humanos nacen libres e iguales; sin importar sexo, género, etnia, idioma, posición política, origen nacional o posición socio-económica.
Justamente, en Argentina, después de exactamente un año de la presidencia de Alberto Fernández, cuyos principios son los de justicia social, soberanía política e independencia económica, luego de candidatearse como promovedor del derecho al aborto legal, seguro y gratuito; ese sueño del movimiento feminista argentino da el primer paso en el Congreso de la Nación.

La ley de interrupción voluntaria del embarazo propone que las mujeres, al momento de decidir abortar, tengan un Estado que las contenga desde lo psicológico pre y post aborto. Además, que la interrupción se pueda hacer de manera segura en un hospital, sin ocultarse en la clandestinidad, eliminando los riesgos que esto conlleva. El plazo es hasta las catorce semanas de gestación y no puede haber objeción de conciencia institucional: si un médico decide no realizarlo, se debe garantizar que otro médico lo efectivice.
Según se informó off the record el debate empezó este 10 de diciembre y se espera que se extienda hasta la noche o, incluso, hasta el día 11 de diciembre. Las opiniones de los diputados serán transmitidas todo el día por Diputados TV.
Lo que pasa afuera del Congreso de la Nación: la marcha ʺverdeʺ, a favor de la promulgación de la interrupción voluntaria del embarazo, y la marcha ʺcelesteʺ, en contra de su promulgación, podrá ser visto por los medios masivos de comunicación nacionales: C5N, TN, Crónica.
Después del intento en el 2018 de aprobar esta ley, hoy nuevamente encontramos a las mujeres en las calles de Buenos Aires al grito de: ʺEducación Sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar, aborto legal para no morirʺ.
Excelente crónica
Excelente crónica, gracias.