Noticias

Crimen de odio y homofobia en Guatemala

Por Marco Loarca. La muerte de un hombre gay ha causado indignación, repudio y ha aumentado la alerta a la comunidad LGBTI. Luis Aldo García sufrió mucho tiempo acoso, discriminación y violencia por su orientación sexual, el resultado fue su muerte.

Por Marco Loarca.

A un mes de la muerte de Luis Aldo García, ni el Ministerio Publico, ni la Procuraduría de Derechos Humanos se han pronunciado sobre el avance del caso, a pesar de la presión social y de la difusión de información a través de los medios de comunicación. El caso se mantiene en total hermetismo.

El pasado 26 de julio fallece García como resultado de una golpiza que le fue propinada por una persona homofóbica en las instalaciones de un gimnasio de la ciudad de Guatemala, donde el realizaba diariamente sus rutinas diarias de ejercicios.

Luis Aldo fue hermano, hijo, tío luz; fue alegría, fue historia de amor.

Luis Aldo García, descrito por sus familiares como un hombre alegre, entusiasta y positivo, por más de un año y medio había sido víctima de acoso por parte de varias personas que asistían al mismo gimnasio. El 22 de junio, luego de un brutal ataque, se comunicó con su pareja, “Manfer”, que inmediatamente llegó al lugar, para  auxiliarlo. La Policía Nacional Civil pudo corroborar que continuaron los ataques verbales homofóbicos y amenazas en contra de Luis Aldo y su pareja. La víctima interpuso una denuncia ante el Ministerio Público y fue atendido por el médico de turno del Instituto Nacional de Ciencias Forenses de Guatemala (INACIF), quien le suturó una grave herida en la cabeza, según el relato de su pareja.

Es evidente el mal abordaje del caso por parte del Ministerio Publico desde el inicio: la denuncia fue tomada como un ataque común de violencia, a pesar que Luis Aldo señaló en sus declaraciones que fue violentado por su orientación sexual y ya había tenido ataques verbales reiterados por parte de sus atacantes. El Ministerio Público ya cuenta dentro de sus formatos de atención con la casilla para visibilizar los casos de crímenes de odio.

Debido a los golpes recibidos y a la depresión por el atropello físico, verbal y psicológico, la salud de Luis Aldo nunca se recuperó; por el contrario, entró en crisis y fue hospitalizado.

Luis Aldo y su pareja, Manfer.

Durante las semanas que estuvo en el hospital, familiares, amigos y organizaciones vinculadas al trabajo por la defensa de los derechos de la diversidad sexual realizaron actividades de recaudación de fondos, que ayudaran con los gastos

En pocos días el caso en las redes sociales tomó fuerza, no solo en la comunidad LGBTI, sino a nivel nacional e internacional. Organizaciones como LAMBDA, la Red Legal y SOMOS estuvieron al pendiente del caso, dando asistencia, acompañamiento y asesoría de manera gratuita a los familiares.

Al momento del deceso de Luis Aldo García, “Manfer” y los familiares deciden continuar recibiendo el apoyo de las mencionadas organizaciones y la familia decide continuar con el proceso legal con la esperanza de que se haga justicia y se sancione a los responsables de los daños que desencadenaron la muerte. Se busca crear un precedente para que se detengan las agresiones contra las personas de la comunidad LGBTI en Guatemala.

Cabe mencionar que el caso, se ha particularizado  por la atención de muchas de las organizaciones de la comunidad LGBTI, la Procuraduría de Derechos Humanos, activistas e incluso de agencias internacionales como ONUSIDA, que el sábado 06 de agosto hizo un llamado al Estado de Guatemala a esclarecer este crimen a través de uno de los periódicos de mayor circulación en el país.

Luis Aldo  fue luz, fue alegría, fue historia de amor, hermano, hijo, tío.  “Siempre lo recordaré como el hermano que me daba alegría en todo lo que hacíamos,” fueron las palabras de Verónica, la hermana del joven.

Actualmente, el caso sigue siendo atendido por varias organizaciones y, a solicitud de la Procuraduría de la Diversidad Sexual de la Procuraduría de los Derechos Humanos y de la familia de Luis Aldo, se sumó al equipo la Asociación de Abogados y Notarios “Líderes Profesionales”, una entidad que trabaja gratuitamente en casos de este tipo en Guatemala; se unieron para llevar a cabo todo el proceso legal apoyados por las organizaciones de sociedad civil y los familiares.

En Guatemala, a diario las personas de la comunidad LGBTI sufre violencia de todo tipo, por parte de personas homofóbicas que tienen de aliada en sus ataques a la impunidad.  Vivimos en un  ambiente hostil, donde la justicia voltea la mirada al momento de abordar el tema de diversidad sexual, sea por resistencia moral, ausencia de conocimientos y, sobre todo, por no querer darle paso a la dignidad humana.

La vida de un joven fue arrebatada por el odio, la desinformación y la homofobia de este país. Activistas y organizaciones de sociedad civil seguirán de cerca el caso para impedir que sea una muerte más que queda impune.

País: Guatemala

Acerca del autor

Marco Vinicio Loarca

Movilización y fortalecimiento del sistema Comunitaria | Guatemala, Ciudad
Organización:Asociación "SOMOS" jóvenes diversos en acción.

Guatemalteco activista y defensor de los derechos humanos de las comunidades LGTBI de la que es parte. En el 2010 comenzó a participar en actividades relacionadas con la diversidad sexual y prevención del VIH. Por 14 años ha sido colaborador en diferentes actividades y proyectos de organizaciones como OASIS, ASI, PASMO, UNIVERSIDAD DEL VALLE, FUNDAMACO, APROFAM con el propósito de ofrecer servicios a la comunidad LGTBI así como concientizar a la población guatemalteca sobre los derechos de este sector de la población. En el año 2011 fundó Somos Diversos en Acción una organización que pretende crear un espacio amigable a los jóvenes gay en Guatemala, facilitar el acceso a servicios de salud diferenciados, becas escolares y acompañamiento psicológico, actividades de entretenimiento, lúdicas y deportivas entre otras. Como parte del equipo de Somos ha generado un espíritu de cooperación con otras organizaciones de la diversidad en actividades de concientización de derechos y ha promovido por la estrategia de acompañamiento que mas jóvenes accedan a los test de VIH, y servicios médicos y de tratamiento diferenciados.

9 Commentarios

Click aquí para publicar un comentario

Responder a Ebén Díaz Cancelar respuesta

  • Ojala se haga justicia, Luis Aldo era una persona educada, siempre hubo una sonrisa para toda persona que que se le acercaba. Perteneciente a una honorable familia, que siempre se han caracterizado por su solidaridad con el prójimo.

  • En mi opinión, este tipo de casos seguirá siendo del montón si no tenemos el valor de denunciarlos como lo que realmente son, violencia contra un grupo en específico – comunidad LGTBI. No esperemos a que nos golpeen para actuar, insistamos en denunciar desde que inician los ataques verbales. Actuemos sin miedo, insistamos. Las organizaciones no deberían trabajar únicamente para prevenir el VIH, deberían haber programas para apoyar a la salud mental de la comunidad, capacitación legal ( he escuchado de muy pocos). Pedir respeto, no necesariamente requiere rebeldía, requiere educación.

  • Lamentable, Gobierno que se sirve del pueblo, valores retrógrados y anti progresistas, nos dejan a nuestra suerte y en casos como estos no hay ni como hacerle, entre nosotros saquemos la tarea
    en Guatemala debes Sobrevivir por tu cuenta
    No seremos la victima

  • Exigimos como Guatemaltecos que aportan al país y al estado se haga Justicia independientemente de las preferencias sexuales es un ser humano, un ciudadano por lo que las leyes deben responder a este cobarde asesinato!! Los culpables de esta muerte deben pagar ya que no solo echaron una vida lastimaron a una madre desconsolada, hermanos sobrinos familias y amigos quienes lo conocimos y exigimos se haga justicia!!!

  • Yo amaba a mi amigo Aldo; yo asistía con él al Gym y si vi sus golpes. Fue algo tan duro ver como corría su sangre sobre el rostro. No es justo lo que ese hombre le hizo a mi querido amigo solo porque mi amigo era gay, debemos de respetar a todos sin importar su forma de vid; espero que esta muerte no quede impune él estaba bien y ahora ya no esta con nosotros. Qué dolor dejó su partida en mi corazón; yo lo amaba el era más que mi hermano.

  • Es muy triste, yo conocí a Luis Aldo y conozco a su familia, es lamentable que no hayan logrado hacer nada para aclarar este hecho. Un ser humano tan bueno e inteligente que no se metía con nadie, no molestaba a nadie, tuvo la mala fortuna de toparse con seres que se hacen pasar con seres humanos. Espero en Dios esto tenga un fina justo.

  • Es curioso que es el primer caso de este tipo que es abordado abiertamente sobre cómo se manifiesta la homofobia en tierras chapinas!? Me pregunto: hay tantos otros casos reportados por colegas LGBTIQ de grupos indígenas que no son reportados. Por qué se reporta este en particular? Solo porque el tipo era rubio (guerito, chele, catire, machillo) y parecía el típico ´chico-bien´ o ´chico fresa´? Me pregunto si la homofobia que viven otros/as colegas LGBTIQ chapines de poblaciones indígenas no cuenta? Creo que esto debe hacernos reflexionar porque no creo que sea justo que solo cuando un chero bien sufre este tipo de atrocidades corremos a reportarlo y denunciarlo y hacemos hasta lo imposible por demandar justicia, pero no se dice nada – y hasta más bien se oculta en algunos casos – cuando no son chicos o chicas que responden al prototipo o estereotipo de chicos/chicas bien. No es justo y debemos reflexionar sobre ello porque seguimos discriminando dentro de nuestras propias comunidades y gremios LGBTIQ.

  • Apreciable Ebén Díaz, recibe mis saludos fraternales, en respuesta a tus inquietudes, déjame darte toda la razón ya que pareciera que este es un caso exclusivo, sin embargo no es así, he realizado un articulo en específico gracias a la autorización de la Familia de Luis Aldo y a la de los licenciados que llevan el caso. Como tú bien mencionas en tu comentario hay muchos casos en el interior del país y tu servidor ha dado acompañamiento a muchos de ellos, sin embargo, por el miedo, la discriminación y las inexistentes garantías sociales en nuestra bella Guatemala, prefieren mantenerlos en el anonimato, e incluso desertan de continuar el proceso legal, ya que es largo y desgastante.
    Quiero compartir también, que estamos trabajando en otros casos mas de discriminación y violencia, como resultado del odio y la homofobia, precisamente con colegas del interior de la república, también hacer mención que la respuesta de muchas de las instituciones tanto estatales como de sociedad civil, no ha sido la esperada, estamos trabajando en ello, ver los canales más saludables para que las comunidades LGBTI, tengamos una mejor articulación y respuesta ante estos casos de violencia y discriminación por orientación sexual e identidad de Genero.

    Por último quiero agradecer el tiempo que has dedicado a darle lectura a este artículo, en espera que continúes haciéndolo con los demás artículos que se publicaran.

    Saludos