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Mini-subvenciones: grandes acciones en la respuesta al VIH en LAC

El 25 de enero, el equipo LAC de la Secretaría del Fondo Mundial, ALEP y Poblaciones Clave, PANCAP, CVC y COIN, con el apoyo de la Plataforma LAC organizaron el webinario “Presentación de las mini-subvenciones para las organizaciones comunitarias de lucha contra el VIH en LAC”, con la finalidad de compartir experiencias y explorar oportunidades de mejora con organizaciones de base comunitaria que participan en la respuesta al VIH.

Luego de dos años de pandemia se ha podido evidenciar el impacto negativo a nivel económico, sanitario y social que está representado el COVID-19 en los países de la región, donde han ocurrido preocupantes interrupciones de la provisión de servicios de salud, escasez de insumos sanitarios, cortes en el suministro de antirretrovirales (ARV), entre otros, que amenazan la respuesta al VIH en Latinoamérica y el Caribe (LAC). Frente a esto, las organizaciones de la sociedad civil y los grupos de poblaciones clave han tenido un papel protagónico para movilizarse cuando y a donde los gobiernos fueron incapaces de hacerlo (para más información véase el informe Sin soltar las riendas: las comunidades como primera respuesta ante la COVID-19 y otras amenazas sanitarias emergentes de ONUSIDA).

Las pequeñas subvenciones tienen gran impacto en la respuesta a las epidemias.

Teniendo en cuenta esta realidad, PANCAP, como administrador de la subvención regional caribeña, ofreció en 2021 unas mini-subvenciones para las organizaciones comunitarias de lucha contra el VIH en región, con la finalidad de apoyar y fortalecer la participación comunitaria y de la sociedad civil en la respuesta al VIH dentro del complejo contexto del COVID-19 que estamos atravesando. Durante el webinario, se exploraron oportunidades para mejorar y ampliar este trabajo como parte de las solicitudes de financiamiento del Fondo Mundial para el VIH que se presentarán en marzo de 2022 en varios países y para otras que están en marcha.

A lo largo de cuatro ponencias se expusieron lecciones aprendidas y recomendaciones. En esa línea, Guillermo Márquez Villamediana, oficial de apoyo comunitario de la Oficina Regional de ONUSIDA para América Latina y el Caribe, abrió el encuentro mostrando un video donde líderes y lideresas de organizaciones que responden al VIH de diferentes países de LAC mencionaron los retos que sus asociaciones han tenido que atravesar en el contexto de la pandemia, partiendo del reconocimiento de que “el COVID, ha afectado desproporcionadamente a los grupos más vulnerables” como las personas que viven con VIH, las personas privadas de la libertad, poblaciones clave, incluidas las mujeres y los jóvenes, indígenas, afrodescendientes, migrantes y refugiados, trabajadoras sexuales, personas usuarias de drogas, entre otros.

En el contexto del COVID-19, muchas de las poblaciones vulnerables no tuvieron acceso a productos alimenticios y de higiene personal (centrales para la respuesta al COVID-19); hubo interrupciones en los servicios de acceso a ARV y muchas personas fueron víctimas de maltrato y discriminación en el contexto del confinamiento obligatorio.

De lo descrito anteriormente, en julio de 2020, ONUSIDA llevó a cabo la iniciativa #SOYCLAVE en la que financió 61 proyectos de 19 países de la región, alcanzando a 700.000 personas. De esta experiencia se resaltaron al menos cuatro aspectos. En primer lugar, se evalúa como exitosa la posibilidad de construir y fortalecer las capacidades de las organizaciones de base en la realización de propuestas de solicitudes de fondos por medio del entrenamiento y acompañamiento.

En segundo lugar, Márquez Villamediana destacó la importancia de la apertura de la convocatoria, que permitió “llegar a organizaciones que históricamente no tenían acceso” a recursos, aumentar el apoyo y ampliar el rango de las experiencias.  Como tercer aspecto, se destacó el afinamiento en mecanismos de rendición de cuentas tanto en lo programático como en lo financiero, que permitió alinear las propuestas de las comunidades con las prioridades del país, las de ONUSIDA, la estrategia mundial y los ODS.

CVCC ofreció pequeñas subvenciones en el Caribe.

En último lugar, el proceso de fortalecimiento de los aspectos comunicacionales de las organizaciones fue clave para la divulgación de sus actividades, la facilitación del diálogo entre asociaciones, el mejoramiento de la incidencia política y el involucramiento de donantes, gobiernos y socios clave que les conectaron con otras posibilidades de financiamiento.

Por su parte, Ivan Cruickshank, director ejecutivo Coalición de Comunidades Vulnerables del Caribe (CVC), hizo referencia a las experiencias en el Caribe y destacó el aporte fundamental de los socios externos en el desarrollo de propuestas, la necesidad de afianzar la comunicación y el apoyo a organizaciones de base más pequeñas.

Ingrid Bretón, de la Fundación Grupo Paloma, de República Dominicana, expuso una experiencia sostenible en la que, por medio de la siembra y venta de vegetales y frutas, personas que viven con VIH y en situación de vulnerabilidad tienen acceso al trabajo. Esta fundación, demostró el éxito de establecer alianzas con financistas, instituciones gubernamentales y particulares. Puede revisar parte de su trabajo en este artículo.

Por último, Lilian de Jesús Gaitán, del Centro de investigaciones y estudios de salud (CIES) de Nicaragua, expuso el trabajo de vinculación con las familias de la comunidad de Belén, en Managua, con las que se promocionaron materiales de prevención de VIH y COVID-19. En estas experiencias se abordaron de manera coordinada diferentes actividades con el gobierno y organizaciones internacionales.

Este tipo de actividades son importantes, pues permite conocer experiencias diversas y aprender de los aciertos y errores de las iniciativas emprendidas por diferentes actores. Aún falta mucho por hacer, una de las personas que intervino desde la sociedad civil comentaba que “aún para estas subvenciones hay estándares muy altos” por lo que el acceso no está garantizado para todas las organizaciones. Es importante reconocer ello y seguir buscando alternativas para incluir a aquellos pequeños grupos quienes están llevando sobre sus hombros la respuesta al VIH en la región.

País: Latinoamérica

Acerca del autor

Constanza Armas

Psicóloga | Argentina
Organización:

Soy venezolana, migrante, feminista. Creo que la participación en los temas públicos de la sociedad civil organizada son la clave para una democracia verdadera. Creo en la libertad, por eso soy activista por los derechos humanos. Creo que todxs merecemos ser nombradxs, por eso intento tener mirada de género. Soy una indignada por los crímenes de lesa humanidad que ocurren desde hace años en Venezuela. Desde estos lugares escribo.

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