Todos los años, el tercer domingo de mayo, a nivel mundial se realiza el CandleLight, una ceremonia de encendido de velas que busca llamar a la reflexión sobre el avance de la epidemia del VIH y su impacto. En Panamá, levantamos la voz para exigir tanto a las autoridades, como a la sociedad en general, que se hagan los esfuerzos necesarios para evitar que más panameños mueran por razones asociadas al VIH.
Actualmente, Panamá atraviesa la peor crisis de desabastecimiento de antirretrovirales que hayamos tenido en la Caja Seguro Social, esto se transformaría en muerte para aquellas personas cuya salud puede complicarse por la falta del tratamiento o por la interrupción intermitente del mismo.
Los gobiernos y tomadores de decisiones asumieron el compromiso de mantener una epidemia concentrada, eliminando todas las barreras de estigma y discriminación que conlleva a la violación de los derechos humano de las personas con VIH; por ello, la sociedad civil realiza actos como esta vigilia mundial, no solo para recordar a las personas fallecidas, sino también para incidir y solicitar acciones y respuestas ante hechos que puedan poner en riesgo el cumplimiento de las metas 90-90-90.
Así, la Asociación Viviendo Positivamente organizó por segundo año consecutivo la Marcha de Antorchas y el CandleLight, para levantar la voz de las personas afectadas por la epidemia.
A pesar de los compromisos asumidos por Panamá, hoy la Caja de Seguro Social enfrenta una crisis de desabastecimiento de medicamentos antirretrovirales (ARV) y reactivos para Carga viral desde hace más de 10 meses. Entre los medicamentos cuya provisión se ha visto interrumpida de manera recurrente están el raltergravir, ritonavir , Kaletra® y Atripla®, este último se entrega a las personas que inician el tratamiento.
Durante la marcha, en representación del Ministerio de Salud (MINSA), el Vice Ministro Eric Ulloa manifestó a Corresponsales Claves que el compromiso del gobierno es mantener la provisión en todas la clínicas de terapia antirretroviral del MINSA, al igual que los reactivos para pruebas de control para alrededor de 2,500 personas que no cuentan con seguro social. Frente a la crisis del Seguro Social, indicó que ya se han reunido con el nuevo director de la institución para buscar las estrategias para solucionar esta situación que afecta a más de 2000 personas con VIH.
Por su parte el jefe del Programa Nacional de ITS/VIH y hepatitis virales, Aurelio Núñez, al dirigirse a los participantes en la marcha, exhortó a la sociedad civil a seguir con el buen trabajo de incidencia pública y política para que el gobierno actual no ponga el tema del VIH en segundo plano. También invitó a toda la sociedad a que en el mes de junio se realicen la prueba de VIH y de esta forma conozcan su condición serológico, esto en el marco del mes de la prueba a nivel nacional, campaña impulsada por la Primera Dama como presidenta de la CONAVIH.
En esta segunda marcha se notó mayor participación de personas, en relación al año pasado, y una mayor cantidad de jóvenes. Corresponsales Claves recogió su mensaje: invitar a los jóvenes a ser parte de la respuesta al VIH, que busquen información sobre las ITS con fuentes confiables, que con educación se rompe la cadena de la trasmisión y se reduce el estigma y la discriminación.
El día de acción, cerró con el CandleLight propiamente dicho. Los y las presentes en el acto encendieron una vela en recuerdo de un familiar, amigo o conocido que falleció a consecuencia del VIH.
En esta ocasión, las luz de las velas no solo tenían la intención de velar a las personas que perdimos, sino mostrar la energía que está moviendo a las organizaciones de sociedad civil para exigir al gobierno nacional que cumpla con sus compromisos de detener la epidemia.
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