La Plataforma LAC – Vía Libre, en coordinación con la Iniciativa Estratégica de Involucramiento de las comunidades del Fondo Mundial (CE SI, por sus siglas en inglés), organizó una reunión virtual orientada a revisar la situación actual del Mecanismo de Respuesta al Covid-19 (MRC19), qué pasará en el futuro próximo y qué se plantea desde el Fondo Mundial respecto de la preparación y respuesta a las pandemias.
Olive Mumba, asesora del Comité de Involucramiento de las comunidades para la respuesta al covid 19 en el Fondo Mundial, señaló que desde ya el Mecanismo de respuesta al covid 19 está pasando a centrarse en la prevención, la preparación, la respuesta, mitigación y recuperación de la pandemia. Esto se viene dando en un contexto en el que los casos están disminuyendo drásticamente.
Como es sabido, desde el primer año de la pandemia, en el 2020, el Fondo Mundial de lucha contra el sida, la tuberculosis y la malaria movilizó recursos para responder al covid y proteger la respuesta a las otras tres enfermedades. Mientras se respondía a la pandemia, fue necesario pensar en una respuesta que contribuyera también a prevenir una situación como la que vivimos en los últimos tres años, teniendo en cuenta el enfoque de género y con la participación de las comunidades.
Mumba dijo que el MRC19 buscó reforzar la respuesta a la pandemia, asegurándose que los sistemas de salud fueran los suficientemente eficaces para responder, mitigar el impacto en los programas de VIH, tuberculosis y malaria, y mejorar de manera urgente los sistemas de salud y comunitarios para que quien requiera atención fuera capaz de acceder a ellos.
En estos momentos, mientras avanzamos hacia el Ciclo de Financiamiento 7 del Fondo Mundial y los países construyen nuevas propuestas para responder a las tres infecciones, la respuesta al covid deja de tener un canal excepcional y deberá ser integrada a las propuestas nacionales y regionales. La funcionaria hizo énfasis en que estas propuestas deben abordar el fortalecimiento de sistemas de vigilancia, la adecuación de servicios de laboratorio y diagnósticos, la capacitación de recursos humanos para el fortalecimiento de los sistemas comunitarios en salud; la producción de oxígeno médico, cuidados respiratorios y terapéuticos y el fortalecimiento de sistemas de gestión de residuos y de productos sanitarios.
Recursos Humanos y fortalecimiento de sistemas comunitarios
Durante la sesión, tanto Olive Mumba como Raine Cortes, insistieron en que el los sistemas de salud públicos y los comunitarios deben ser ágiles para responder frente a cualquier problema que surja y, en particular los últimos deben poder apoyar la vinculación con los sistemas de salud.
Por ello, se hace un fuerte hincapié en el fortalecimiento de recursos humanos para la salud como parte de la preparación para responder a las pandemias para asegurar un acceso equitativo y aumentar los servicios de salud integrados y centrados en las personas; con capacitación adecuada y pago justo.
En su presentación, Mumba también hizo énfasis en que el fortalecimiento de los sistemas de la comunidad aborde la violencia basada en género para fortalecer los sistemas de salud y sus capacidades en caso ocurra una pandemia. Esto debe incluir el conocimiento de los enfoques de género y derechos humanos, así como la ruta para acceder a los servicios requeridos. Esto mismo debe tomarse en cuenta para mantener el acceso a servicios para las comunidades marginalizadas y criminalizadas durante una pandemia.
Entre las acciones que se mencionaron deben llevarse a cabo desde las organizaciones de la comunidades están el desarrollo de liderazgo, el monitoreo liderado por la comunidad, la incidencia e investigación liderada por la comunidad, la participación comunitaria, los vínculos y la coordinación entre las organizaciones de base.
En camino hacia un tratado pandémico
El mensaje desde el Fondo Mundial, a través de sus funcionarias, fue claro: para estar preparados para prevenir y hacer frente a las pandemias, debemos fortalecer la participación comunitaria, tanto en la implementación de acciones como en los espacios de toma de decisión y crear confianza en los servicios de salud y los servicios comunitarios.
Así, reconoce la importancia de la participación e involucramiento de las comunidades, no solo como beneficiarios de actividades, sino también como proveedores de servicios y esto debe ser relevado en todo el proceso de decisión de políticas públicas, como lo señaló Raine Cortés, durante la reunión.
Este aprendizaje debe guiar el rol de las organizaciones de la sociedad civil en la discusión y negociación del Acuerdo u Otro Instrumento Internacional Sobre Prevención, Preparación Y Respuesta Ante Pandemias (Tratado Pandémico) que ahora se discute en la Organización Mundial de la Salud y busca que todos los países acuerden líneas de acción básicas para que la siguiente pandemia nos encuentre más preparados y articulados en la respuesta.
El borrador del Tratado Pandémico, circulado en mayo pasado, toma en cuenta el rol de las comunidades en el monitoreo de los riesgos de enfermedades zoonóticas y en la provisión de servicios sanitarios. Este parece haber sido el gran aprendizaje de la respuesta al covid y otras epidemias.
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