Por Job Licera.-
En el 2022, Ancla, realizó más de 21 proyectos comunitarios, trabajando para y de la mano de poblaciones como: indígenas, población rural-dispersa, población general, LGBTIQ+, personas afrocolombianas y migrantes, acercandoles la oferta institucional del departamento de Antioquia y del Chocó, donde también capacitaron a más de 750 profesionales de la salud. En una buena práctica de rendición de cuentas, Fundación Ancla presentó un resumen de su trabajo.
La Fundación Ancla es una Organización de Base Comunitaria (OBC) con sede en Medellín, Colombia, que se caracteriza por su atención especializada, estrategias comunicacionales creativas e innovadoras y por tener un enfoque diferencial del concepto de la salud, dado que, desde la Fundación, lo primero es la población y que la salud pueda recorrer las mismas calles que los habitantes de la ciudad.
Los ejes centrales que abordó la Fundación durante el año que terminó fueron seguridad alimentaria y nutricional, salud sexual y reproductiva, infecciones respiratorias agudas, enfermedades no transmisibles, incidencia política en tuberculosis, prevención en el ámbito laboral, lepra, viruela símica, zoonosis, VIH, calidad de vida en personas que viven con VIH, entre otros.
Se estima que 15.000 personas del departamento de Antioquia y más de 7.000 en el departamento del Chocó, se beneficiaron. Entre ellos, más de 3.000 indígenas y más de 6.000 de la población rural-dispersa.
Andrés Cardona, fundador y director de Fundación Ancla, considera que esto es un sueño hecho realidad, que además ve como se extiende a través de la región, a nivel internacional, con el proyecto de calidad de vida para personas que viven con VIH o SIDA, donde hacen incidencia en países como Argentina, Brasil, Colombia, Chile, Perú y México.
El director de la Fundación dijo unas palabras sobre lo que espera sea el 2023 para Ancla y su población objetivo: “Queremos que la Fundación Ancla sea un recipiente que reciba para poder dar a la comunidad una calidad de vida digna, que las poblaciones, tanto del Chocó como de Antioquia, puedan conocer su estado de salud y su diagnóstico, que haya un trato diferencial de género y poder promover campañas de comunicación que se alejen de lo tradicional, que podamos enseñar a través de la educación y de la Comunicación para el Cambio de Comportamiento (CCC), que son las estrategias insignia de la organización”.
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