En México los lineamientos generales de vacunación para el 2024 publicados recientemente indican que hombres, mujeres, y mujeres trans que viven con VIH se pueden vacunar hasta los 49 años contra el virus del papiloma humano (VPH) principal causante del cáncer de cuello uterino y verrugas anales.
Existe una relación entre el VPH y el VIH; al respecto Luis Adrián Quiroz, coordinador general de Derechohabientes Viviendo con VIH del IMSS (DVVIMSS) y vocal del CONASIDA, mencionó en un grupo de WhatsApp centrado en el tema de derechos sexuales y reproductivos que “las personas que vivimos con VIH estamos más expuestos a adquirir la infección por VPH, con mayores complicaciones que las personas sin VIH, de ahí la importancia que esté en los cuadros de vacunación. No se tiene un tratamiento específico para la infección, solo para las manifestaciones de enfermedad como verrugas y cáncer. Recordemos que las personas que vivimos con VIH hemos sido excluidos por el estigma y siempre se privilegió a otras poblaciones no menos importantes, pero con un tema de incluir programas de gobiernos de prevención combinada es que impulsamos desde hace un año el tema en el CONASIDA en México”.
La inclusión de las personas con VIH en los esquemas de vacunación es importante. Así lo comentó por el grupo mencionado Rubén Mayorga-Sagastume, Asesor Principal, Participación de la Sociedad Civil para la Eliminación de Enfermedades Transmisibles de la OPS: “el tema de aplicación en personas con VIH es de extrema importancia, dada la frecuencia de lesiones y cánceres relacionados a VPH, en cuello del útero, ano, boca y faringe, pene”.La idea es que forme parte del combo de la prevención combinada.
Quiroz, quien fue uno de los activistas que impulsó esta medida, en una comunicación con Corresponsales Clave, mencionó que fue clave para obtener este logro el trabajo en red y la inclusión de poblaciones clave en la discusión y redacción de las guías “en México, las guías se elaboran junto a expertos y personas que viven con VIH, lo que asegura que las personas se encuentren en el centro de la respuesta”.
Además, esta inclusión permite que activistas que viven con VIH se formen en temas médicos y tengan una mirada más aguda para la incidencia en salud; al tiempo que los profesionales sanitarios tienen la oportunidad de entender las dinámicas de vida y perspectivas de las poblaciones clave.
Otro aspecto central para alcanzar este tipo de logros es hacer alianzas estratégicas, que ayudan a que las voces y necesidades de las poblaciones clave sean escuchadas. En esta medida en particular Quiroz reconoce el trabajo de doctora Alethse de la Torre, directora del CENSIDA.
Entre las barreras identificadas por el activista se encuentra la fragmentación del sistema de salud y que para la administración de la vacuna se requiere una referencia médica. A pesar de esto, ya se esta implementando la medida. Se espera que surta efecto el trabajo en sensibilización e información para que se multipliquen las administraciones y se dé paso a mayores estudios sobre la relación entre VPH y VIH.
México 
Añadir comentario