Con el objetivo mejorar la participación de las comunidades en el Ciclo de Financiamiento siete (CF7) del Fondo Mundial contra el VIH, la Tuberculosis (TB) y la malaria (Fondo Mundial), la International Council of AIDS Service Organizations (ICASO), acompañada por la Plataforma LAC, realizaron actividades de asistencia técnica en Paraguay.
En estas participaron miembros de sociedad civil y Poblaciones Clave (PC) como Ñepyrú, Organización por un mismo ideal (OPUMI), Red paraguaya de diversidad sexual, Red de ONGS que trabajan VIH, Somos Gay, Asociación Alientos de Vida (ALVIDA), Fundación Vencer, RP-CIRD, TB-ALVIDA, Casa Diversa, entre otros.
Hubo varios intercambios que tuvieron un alcance de más de 100 referentes, se realizaron grupos focales, entrevistas, reuniones, revisión de documentos, entre otros. Zulma Unzaín, directora de Asociación Alientos de Vida (ALVIDA), la organización que trabaja el tema de TB en el país resaltó lo fácil que fue el dialogo debido al trabajo que vienen construyendo desde hace años, siempre tenemos “muy buena la comunicación con las organizaciones hermanas”.
Por otra parte, Gabriel Grommeck, activista de Somos Gay resaltó la necesidad mejorar las instancias de diálogo entre organizaciones de la sociedad civil, aprovechando que son pocas las que se centran en estas enfermedades.
Más allá de las percepciones acerca de la cualidad de estos espacios, un aspecto que resaltó durante la experiencia fue lo organizadas que estaban las demandas por parte de la sociedad civil, incluso antes de la asistencia técnica. Grommeck mencionó que esta estructuración puede tener que ver con la adaptación de modelos organizativos regionales a la realidad paraguaya y con el trabajo que se viene desarrollando desde hace años.
Entre las poblaciones que pudieron discutir y señalar sus necesidades destacan los hombres que tienen sexo con hombres (HSH), las trabajadoras sexuales, las personas trans y personas que viven con VIH. Igualmente, representantes de personas recluidas en centros penitenciarios, Niñas adolescentes y mujeres jóvenes y Comunidades indígenas.
Dentro de Paraguay, tal como mencionó Unzaín es primordial partir de una perspectiva de interculturalidad y género, que estuvo presente durante los encuentros, así como las propuestas que apuntaban al fortalecimiento del monitoreo en la respuesta al VIH, con énfasis en la prevención; provisión de condones y lubricantes; el diseño e implementación de planes de incidencia en respuestas para incluir a las personas que viven con vih poblaciones clave en las políticas de protección social y el respeto a los derechos humanos.
Al respecto, Grommeck agrega:
Es necesario diseñar políticas de gasto basadas en epidemias, es imperativo considerar y asignar recursos de manera proporcionalmente mayor hacia grupos marginados y expuestos como lo son los hombres gays/bisexuales y las Mujeres trans. Esta atención específica no solo es una cuestión de justicia social, sino también una medida para abordar las brechas de salud existentes, fortalecer la resiliencia de toda la comunidad y una manera efectiva de responder a la epidemia de VIH. A mayor daño, mayor debe ser la inversión de la prevención, el cuidado y la reparación.
En lo que respecta a las organizaciones se visibilizó la necesidad de fortalecer la estrategia de pares y vinculación para asegurar el diagnóstico temprano; diseñar e implementar estrategias de vigilancia social; análisis de información y rendición de cuentas. Resalta el enfoque de la calidad de vida desde las organizaciones y que se incluya el tema de la salud mental de personas clave y personas con vih.
Entre las conclusiones expuestas por la Plataforma LAC se menciona que:
Las comunidades, identificaron como necesidades prioritarias el cumplimiento de las estrategias recogidas en el Plan Estratégico Nacional (PEN) vigente, y subrayaron la importancia de que el Estado cumpla con sus obligaciones con enfoque de derechos y género. Además, observaron la importancia de que las organizaciones de la sociedad civil presten servicios para las PC y PVV, y que se generen mecanismos concretos de vigilancia social y reclamo frente al incumplimiento de las obligaciones por parte de las instituciones públicas.
Vale destacar que un 35% de las personas involucradas el PEN pertenecen a organizaciones de la sociedad civil, incluidas las personas que viven con VIH y representantes de organizaciones de población clave, por lo que el espíritu del documento goza de una amplia aceptación y conocimiento por parte de las comunidades afectadas por las tres enfermedades.
Paraguay ha sido receptor neto de recursos y de cooperación por parte del Fondo Mundial para la lucha contra el VIH, la Tuberculosis y la Malaria desde los inicios de esta multilateral en 2002 y desde ahí ha consolidado algunos logros como ser el primer país en obtener la certificación libre de malaria en América Latina en 2018 y ser pionero en la contribución monetaria al Fondo Mundial en 2022.
Otros enlaces de interés:
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Nota: Nota: la asistencia técnica también se desarrollo en otros países como Cuba, Guatemala, Haití, Honduras y Venezuela.
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